Desde el inicio de su mandato, el presidente Biden ha instado al Congreso a asegurar la frontera y a reformar el sistema de inmigración fallido. Mientras los republicanos en el Congreso han priorizado la política partidista sobre la seguridad nacional, rechazando dos veces las reformas más significativas y justas en décadas, el presidente y su Administración han tomado medidas para asegurar la frontera, tales como:
- Implementar medidas ejecutivas que prohíban el asilo a inmigrantes que cruzan ilegalmente la frontera sur cuando el número de interceptados es elevado;
- Desplegar un número récord de personal de las fuerzas del orden, infraestructura y tecnología en la frontera sur;
- Incautar cantidades sin precedentes de fentanilo en los puertos de entrada;
- Revocar las visas de los ejecutivos y funcionarios gubernamentales extranjeros que se benefician de la inmigración ilegal a EE.UU.; y
- Ampliar esfuerzos para desmantelar redes de tráfico de personas y procesar a quienes violan las leyes de inmigración.
El presidente Biden cree en la importancia de asegurar la frontera, así como en ampliar vías legales y mantener a las familias unidas. También apoya a los inmigrantes que llevan décadas en Estados Unidos, pagando impuestos y contribuyendo a sus comunidades. Su plan de reforma migratoria, presentado al Congreso el primer día de su mandato, refleja la necesidad de una frontera segura y la protección de los inmigrantes indocumentados de larga data. Aunque el Congreso no ha actuado sobre estas reformas, la Administración Biden-Harris ha trabajado para fortalecer el sistema de inmigración legal. Esto incluye defender enérgicamente DACA, ampliar la cobertura de la Ley de Cuidado de Salud Asequible a los beneficiarios de DACA y establecer nuevos programas de reunificación familiar.
Sin embargo, se pueden hacer más esfuerzos para brindar estabilidad a las familias de estatus mixto y a los “Dreamers”. Por ello, el presidente Biden ha anunciado nuevas medidas para mantener a las familias estadounidenses unidas y permitir que más jóvenes contribuyan a la economía.
Mantener unidas a las familias estadounidenses
Hoy, el presidente Biden ha anunciado que el Departamento de Seguridad Nacional tomará medidas para garantizar que los ciudadanos estadounidenses con cónyuges e hijos no ciudadanos puedan permanecer unidos con sus familias. Este nuevo proceso permitirá a ciertos cónyuges e hijos no ciudadanos solicitar la residencia permanente legal, a la que ya tienen derecho, sin tener que salir del país. Estas medidas promoverán la unidad familiar y fortalecerán la economía, beneficiando al país y ayudando a los ciudadanos estadounidenses y a sus familiares no ciudadanos a permanecer juntos. Para acogerse a estas medidas, los no ciudadanos deben haber residido en Estados Unidos por 10 años o más antes del 17 de junio de 2024, estar legalmente casados con un ciudadano estadounidense y cumplir con todos los requisitos legales pertinentes. En promedio, las personas elegibles han residido en EE.UU. durante 23 años. Aquellos que sean aprobados tras la evaluación del DHS dispondrán de tres años para solicitar la residencia permanente, pudiendo permanecer con sus familias en EE.UU. y optar a una autorización de trabajo de hasta tres años. Esta acción protegerá a aproximadamente medio millón de cónyuges de ciudadanos estadounidenses y a unos 50,000 niños no ciudadanos menores de 21 años con progenitores casados con ciudadanos estadounidenses.
Facilitación del proceso de concesión de visas para los graduados universitarios de EE.UU., incluidos los “Dreamers”
El presidente Obama y el entonces vicepresidente Biden establecieron DACA para permitir que los jóvenes traídos de niños a EE.UU. pudieran salir de las sombras y contribuir significativamente al país. Doce años después, los beneficiarios de DACA, que empezaron como estudiantes de secundaria y universitarios, están construyendo carreras exitosas y formando sus propias familias. El anuncio de hoy permitirá que aquellos, incluidos los beneficiarios de DACA y otros “Dreamers”, que han obtenido un título en una institución de educación superior estadounidense y recibido una oferta de empleo en un campo relacionado con su título, reciban visas de trabajo de forma más rápida y segura. Reconociendo que es de interés nacional garantizar que quienes se han educado en EE.UU. puedan usar sus habilidades para beneficiar al país, la Administración está tomando medidas para facilitar la tramitación de visas de empleo para los graduados universitarios con ofertas de trabajo en campos altamente calificados, incluidos los beneficiarios de DACA y otros “Dreamers”.
Fuente: www.whitehouse.gov
